La sesión de eliminación láser de tinta de tatuaje dura aproximadamente 30 minutos y sus primeros resultados son visibles desde la primera sesión.

Sin embargo, en la gran mayoría de los casos, es necesario realizar varias sesiones para poder eliminar la tinta y se recomienda esperar aproximadamente entre 4 y 8 semanas entre cada sesión.

Existen varios factores que pueden afectar el resultado del tratamiento:

• Antigüedad: cuanto más antiguo sea el tatuaje, más fácil será eliminarlo.
• Tamaño: Es evidente que el proceso para borrar un tatuaje grande será mas largo que un tatuaje pequeño.
• Localización:el tratamiento será más rápido sobre las zonas donde la piel es más fina que las zonas donde es más gruesa porque el pigmento del tatuaje penetra menos profundamente.
• Profundidad: si se aplicó mucha presión al hacer el tatuaje, el pigmento estará en una capa más profunda, lo que requerirá más sesiones
• Color de la tinta: hay pigmentos que son más difíciles de eliminar como el amarillo, azul claro, blanco o verde, y otros que se eliminan con más facilidad como el negro y el azul oscuro.
• Composición: cuantos menos metales pesados tenga la tinta, más fácil será eliminarla.
• Color de la piel: las pieles claras suelen responder mejor a los efectos del láser y necesitan menos sesiones.

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Para empezar, siempre preparamos la piel con una crema calmante para reducir lo más que se pueda las molestias. La aplicación del láser provoca una sensación de mini golpes sobre la piel, que pueden ser incómodos, pero no necesariamente dolorosos. Sin embargo, la percepción del dolor es algo subjetivo y cada persona lo experimenta con distinta intensidad.

Para acelerar la recuperación y maximizar los resultados del tratamiento, sigue estos consejos:

• Evita la exposición solar al menos durante una semana después del tratamiento y luego usa un protector solar con un factor de protección alto todos los días.
• Aplica todos los días la crema que te recomendaremos para para ayudar a la recuperación de tu piel.
• Limpia tu zona tratada con cuidado el día después del tratamiento, sin frotar ni rascar tu piel, con un producto suave y sin alcohol. Evita el uso de productos que puedan irritar tu piel.
• Sigue nuestras indicaciones y usa los productos adecuados que te recomendáramos.

En principio, cualquiera persona puede realizar este tratamiento. El láser es aplicable a casi todo tipo de pieles y todas las edades.

Sin embargo, está contraindicado para las personas que tienen o cuentan con:

• Desfibriladores o marcapasos.
• Antecedentes de cáncer de piel, hemorragias. ataques epilépticos
• Fotosensibilidad, diabetes, enfermedades cardiacas, cáncer.
• Cicatriz queloide o herpes en la zona del tratamiento
• Embrazo o periodo de lactancia.
• Lunares potencialmente cancerosos.
• Auto-bronceantes o piel con un bronceo reciente pronunciado.
• Lesiones activas o abiertas.